miércoles, 13 de junio de 2012

Diario de la Eurocopa: Día 5

La Eurocopa avanza. Ayer comenzó la segunda jornada en el Grupo A y las cosas se empiezan a ver un poco más claras. Grecia se complicó la vida sobremanera después de caer ante la República Checa (1-2) como consecuencia de una 'caraja' en los cinco primeros minutos. En ese breve espacio de tiempo, Jiracek y Pilar, los extremos checos, echaron por tierra las ilusiones de los griegos.

Grecia, cerca de ser eliminada
Rosicky volvió a ser clave. Manejó el partido en la primera mitad a su antojo. La República Checa y Grecia bailaban al son del centrocampista del Arsenal pero su seleccionador, Bilek, se precipitó al dejarle en el banquillo en el descanso. No había razón para ello y, como consecuencia, los 45 minutos posteriores fueron totalmente diferente.

Igual que en el partido ante Polonia, Grecia se fue creciendo con el paso de los minutos. Fernando Santos fue poniendo progresivamente toda la carne en el asador. Cech cometió un error inusual en él y dejó el balón en bandeja para que Gekas marcara. El resto fue un quiero y no puedo de los griegos, que se limitaron a meter balones al área en busca de un tesoro que nunca llegó, y en ello tuvo que ver el terrible partido de Samaras.

Blaszczykowski
Por otro lado, la temible Rusia se enfrentó a la coanfitriona Polonia (1-1). Mucha rivalidad entre ambos países y los incidentes entre aficionados antes del partido fueron la nota negativa. En el césped, todo lo contrario. El choque fue vibrante, tuvo ritmo y ocasiones. Rusia consiguió aplazar, de inicio, la esperanza polaca. Zyryanov, Shirokov y Denisov tenían el balón en el centro del campo y buscaban enlazar con los tres de arriba. Arshavin estuvo bien en la primera parte, aportó la calma necesaria y puso los galones.

Dzagoev siguió demostrando que es uno de los futbolistas más en forma de la competición. Adelantó a Rusia y sumó su tercer gol, por lo que es el máximo goleador del torneo con tres dianas. En la segunda parte, Polonia puso más y Blaszczykowski se sacó de la chistera un zurdazo que coló en la portería de Malafeev para llevar la locura a las gradas del Estadio Nacional de Varsovia.

Dio la impresión de que Rusia llegó muy justa físicamente a los minutos finales de partido. Ambas selecciones sacaron la bandera blanca, firmaron la tregua y dieron por bueno un empate que deja todo abierto para la última jornada.

2 comentarios:

  1. Lamentablemente Rosicky se lesionó y eso precipitó su salida.
    Saludos

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  2. concuerdo en un cien por cien con Nahuel, lastimosamente para las esperanzas checas, su mejor figura Rosicky se lesionó y con él las aspiraciones de su selección

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