España salva el primer escollo

Cuando uno llega a las eliminatorias directas no hay margen de error. Una mala tarde, un fallo, una derrota, y para casa. Pero España ha sabido superar a Portugal y ya espera a Paraguay en cuartos de final.

El comienzo del partido fue muy intenso por parte de la selección española. Las sensaciones eran distintas a las de encuentros anteriores, había más rapidez en la circulación del balón, más movimiento e incluso disparos a puerta. Así, España gozó de varias ocasiones claras para adelantarse en la primera parte pero un espectacular Eduardo atajaba todo lo que iba hacia su portería. El balón era única y exclusivamente de color rojo. Xabi Alonso, Busquets, Xavi e Iniesta se buscaban y se encontraban en el centro del campo. Villa creaba siempre peligro desde la banda izquierda y Torres estaba mucho más activo que en la fase de grupos. Mientras tanto, Portugal se encerraba y esperaba metida en su campo. Pepe ayudaba siempre a los centrales y conseguía desbaratar muchas acciones.

España evidenció en muchos momentos falta de juego entre líneas. Su posesión se fue convirtiendo, a medida que avanzaba la primera parte, en pases más lentos e imprecisos. No había un hombre que se colara entre la línea de defensa de Portugal y la línea de centrocampistas, ya que Xavi venía a recibir mucho más atrás. Los primeros 45 minutos terminaron con cierta caraja española.

Pero la segunda parte tenía mucho que ofrecer aún. Xabi Alonso y Busquets siguieron demostrando por qué ambos son titulares en esta selección. A ver si, por fin, se callan muchas bocas que parecen desestabilizar y desacreditar a un gran seleccionador. Fue precisamente Del Bosque quien quitó a Torres para dar entrada a Llorente. El navarro fue sencillamente espectacular. Tuvo dos ocasiones claras de gol y su capacidad para aguantar el balón de espaldas es magistral. Con este cambio, España volvió a ponerse las pilas y, en una jugada en la que intervienen Iniesta, Xavi y Villa, el asturiano inauguró el marcador. Otro chicharro más, y van cuatro. El mejor de la Roja, sin duda.

Portugal acusó la falta de un plan 'b' y con media hora por delante apenas supo reaccionar. Cristiano Ronaldo, desaparecido en los 90 minutos, se empeñaba en discutir con el árbitro, el entrenador y sus compañeros. España prácticamente no pasó apuros hasta el final y se planta en cuartos pese a no haber mostrado todavía su mejor versión.

Allí espera Paraguay, que se impuso a Japón en la tanda de penaltys. Un partido malo, feo, horrible y todos los adjetivos peyorativos que se les ocurran. Ambos equipos se empeñaron en no marcar gol y jugárselo todo desde los once metros. Si los sudamericanos vuelven a mostrar esa imagen, España puede pasar por encima de ellos de forma escandalosa. Seguramente no repitan ese partido, pero la selección española sigue siendo claramente favorita. Una oportunidad inmejorable para llegar a las semifinales, si ningún árbitro lo impide.