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Foto: SuperDeporte |
El Getafe dio la campanada. Todo hacía presagiar una victoria fácil para el Barcelona, pero los azulgrana se toparon con un serio Getafe y con un mal partido propio. Los catalanes siempre tienen ocasiones, por inercia, pero no se encontraron nada cómodos en el Coliseum. Faltó juego entre líneas y explotar más las bandas, algo que le costó ver a Guardiola. Varela aprovechó el punto más débil del Barça para marcar el gol definitivo.
Íñigo Martínez lo volvió a hacer. En el derbi vasco sorprendió a propios y extraños al marcar un gol de esos que se ven cada mucho tiempo, desde su propio campo. Ayer lo repitió en el Benito Villamarín, y de qué manera. Era el minuto 92 y esa bendita locura le dio los tres puntos a su equipo. Además, el Granada asaltó San Mamés. El gran Athletic de Bielsa se atascó ante los andaluces y no supo cómo batir a un gran Roberto.
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Foto: El Periódico de Aragón |
El Betis volvió a ver puerta, pero no fue suficiente para transformar esos goles en forma de puntos. Acumula nueve jornadas consecutivas sin ganar y sólo el gran inicio de temporada le mantiene a flote. Un bache grande que ha estado a punto de costarle el puesto a Pepe Mel. El técnico mantiene su puesto gracias a la delicada situación económica del Betis. Si el conjunto cae a puestos de descenso, sería más barato echarle. Triste.
Hay niños que todavía no han visto ganar al Atlético de Madrid en el Santiago Bernabéu. El sábado parecía que las tornas iban a cambiar. Un Madrid atascado, Xabi Alonso tapado por Diego en un gran acierto de Gregorio Manzano y el gol inicial de Adrián hicieron soñar a los colchoneros, pero el Atlético no supo defenderse y Courtois cometió un penalti sobre Benzemá que le valió la expulsión. A los blancos les siguió costando, pero cuando abrieron la lata volvieron a ser imparables.